EN BUNIEL LA SEGURIDAD DE LOS CIUDADANOS ES MÁS IMPORTANTE QUE LAS FIESTAS: Se ha anulado la paella popular de la fiesta de San Isidro, creando una partida para gastos en la lucha contra el virus, ya se han invertido 5.000 €. Hay mascarillas para todos los vinculados con el pueblo, aunque no estén empadronados. Han unido fuerzas con la asociación de empresarios del polígono de Villalonquéjar, potenciando el tejido asociativo y los recursos locales han conseguido mejores precios. Se han donado también mascarillas, guantes y geles hidroalcohólicos a la Guardia Civil y a la Iglesia, se han realizado fumigaciones periódicas.
En el siguiente enlace puedes consultar la noticia del Diario de Burgos 16/05/2020
Buniel sacrifica partida de fiestas para luchar contra el virus
Mientras tanto en Monasterio de Rodilla, después de más de dos meses de estado de alarma, con al menos 54.000 euros de presupuesto para festejos populares se ha repartido por empadronado una mascarilla no reutilizable KN95, no todas en buen estado. No se sabe dónde se han conseguido pero no han sido adquiridas en la farmacia del municipio.
Debido a las noticias sobre mascarillas KN95 que la Consejería de Sanidad de la Junta de Castilla y León ha retirado por ser defectuosas, el Ayuntamiento debería de aclarar que las repartidas entre sus vecinos sí están debidamente homologadas, pues no se ve el marcado CE.
Puesto que el uso de mascarillas va a ser obligatorio en los espacios públicos, el Ayuntamiento de Monasterio de Rodilla debe de tomar ejemplo de otros, ser solidario y dar prioridad a la seguridad de los ciudadanos.
https://www.elmundo.es/espana/2020/05/17/5ec13906fc6c83957b8b4635.html
Mientras en otros municipios se ha sacrificado la partida de fiestas de San Isidro, en Monasterio de Rodilla se han tirando cohetes, petardos, por la tarde y por la noche. En estos momentos no entendemos qué es lo que hay que celebrar.
«En su cerrada mollera no entraban ni podían entrar otras luces sobre el santo ejercicio de la caridad; no comprendía que una palabra cariñosa, un halago, un trato delicado y amante que hicieran olvidar al pequeño su pequeñez, al miserable su miseria, son heroísmos de más precio que el bodrio sobrante de una mala comida». BENITO PÉREZ GALDÓS.